Un euro desprovisto de legitimidad
Por Bruno Théret*
A partir de este mes de enero de 2002, la mayoría de los países de la Unión Europea reemplaza sus monedas nacionales por el euro. El autor sostiene de manera polémica que la nueva moneda carece de los pilares de confianza necesarios para afianzarse en las distintas poblaciones. El euro no poseería aún el respaldo simbólico, ético y político necesarios para convertirse en moneda común europea. A falta de esta moneda común, nace entonces una moneda única.
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A partir de ahora, el euro está sometido a una prueba de verdad para la que no está suficientemente preparado. Hasta ayer moneda externa utilizada por los mercados financieros y las empresas involucradas en comercio exterior, toma ahora la forma de billetes y monedas que circulan en las transacciones cotidianas....
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