China retorna al pragmatismo
Por Fu Bo*
Priorizar su desarrollo económico después de la devastación que significó la revolución cultural maoísta implicó para China una política de acercamiento y alianza con Estados Unidos. Primero en torno a una común hostilidad hacia la URSS; actualmente a favor de la campaña anti terrorista. Pero Pekín no puede evitar ser objeto de la política de contención de potencias emergentes que lleva adelante Washington, en el contexto del relativo aislamiento respecto de otros países en vías de desarrollo a que lo confina su política pro occidental.
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Fue la ideología y no el interés nacional lo que condicionó la política exterior china desde la instauración de la República Popular, en 1949, hasta 1972, fecha en la que los dos enemigos mortales, China y Estados Unidos, se reconciliaron y se aliaron contra la Unión Soviética. Ese acercamiento contribuyó...
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