Una guerra para la dominación
Por Michael T. Klare*
La campaña contra el terrorismo lanzada por el presidente de EE. UU. George W. Bush tras los atentados de septiembre de 2001, se sumó como prioridad a las dos que había establecido anteriormente: la transformación de las capacidades militares y la adquisición de nuevas fuentes de petróleo en el exterior. Los tres objetivos se han fusionado en una estrategia única de dominio planetario, de muy alto riesgo.
POST TYPE: post
A partir del 11 de septiembre de 2001, Estados Unidos se concentró hasta tal punto en la guerra contra el terrorismo, que ésta parece haberse convertido en el único objetivo de la política exterior de la administración Bush. Es cierto que el Presidente estadounidense reiteró en varias ocasiones que la...
Si querés seguir leyendo
O
Si ya sos suscriptor,
entrá aquí
Más notas de la edición Edición NOVIEMBRE 2002
Destacadas del archivo




