Malvinas y la democracia
Por Federico Lorenz*
La invasión militar de las islas Malvinas, en 1982, no fue sólo una chapuza militar que acabó en derrota. Trajo como consecuencia que ahora haya allí una fortaleza y tantos militares como isleños. También hizo retroceder por años a la diplomacia argentina, que hasta entonces gozaba de una posición internacional favorable en sus legítimas reivindicaciones. La Argentina democrática de hoy no es la dictadura de 1982, y dispone además de un sólido apoyo regional, en particular de Brasil, la base esencial para fortalecer sus reclamos. Pero el principal desafío que plantea "el tema Malvinas" es interno: la estrategia ante Gran Bretaña debe plantearse a partir de la reconstrucción democrática en curso.
* Historiador y escritor.
Accedé a todo el contenido por solo $3500 por mes.
Para acceder a este contenido debes tener una Suscripción Plus (edición mensual + archivo).Si aún no posees una, puedes adquirirla aquí.
Si ya tenés cuenta accedé aqui
Más notas de la edición Edición ABRIL 2010
Destacadas del archivo