Esperanzas y simulacros de cambio en Irán
Por Shervin Ahmadi y Philippe Descamps*
El nuevo Parlamento iraní, que habrá de reunirse en mayo, contará con menos ultraconservadores. Pero más allá de las apariencias de pluralismo, el juego electoral oculta la estrechez de las transformaciones sociales pasibles de ser encaradas. La fuerza del régimen radica hoy más en el fermento nacionalista que en la prédica islámica.

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“¡Ni vencidos ni sometidos!” En este 10 de febrero de 2016, la muchedumbre se anima alrededor de un turbante blanco. El presidente Hassan Rohani acaba de unirse al cortejo de la Fiesta anual de la Revolución en la avenida Azadi, una de las principales arterias de Teherán. El eslogan repetido...
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