Los indios dicen no
Por Praful Bidwai*
Tras la tragedia del tsunami en Japón, el mundo ha vivido al ritmo de los inciertos acontecimientos de la central nuclear de Fukushima y sus seis reactores. Así, se reavivó el debate sobre la conveniencia o los riesgos de la utilización de centrales atómicas para producir electricidad, y acerca de sus controles (o la falta de ellos). En India, la protesta contra la instalación de un reactor europeo a agua presurizada se extiende cada vez más.
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En los pueblos alejados de la cordillera de Sahyadri, en la costa oeste de India, los nombres de la empresa nuclear francesa Areva y de su modelo de reactor presurizado europeo (EPR) se han incorporado al lenguaje cotidiano, al igual que los términos “radioactividad”, “plutonio” y “residuos nucleares”. Estos pueblos...
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