En la caldera del poder iraní

Por Ahmad Salamatian*

Desde la noche del 12 de junio, Irán asiste a las mayores protestas desde la proclamación de la República Islámica en abril de 1979. Las manifestaciones masivas en rechazo a la victoria electoral del presidente conservador Mahmud Ahmadinejad ante el reformador Hussein Musavi -fruto de un proceso cuanto menos sospechoso-, se han ido diluyendo debido a la represión. No obstante, sacaron a la luz las diferencias en el seno de la elite político-religiosa y debilitaron la legitimidad del régimen, basado en una doble soberanía, popular y divina.

«No actúen como personas al fin del mandato a las que sólo les quedan unos meses; prepárense para cinco años más de ejercicio.» Así, dirigiéndose a los miembros del gobierno, nueve meses antes de la elección presidencial del 12 de junio de 2009, el ayatollah Ali Jamenei no dudaba en...

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