Progreland
Por Julio Burdman*
Las elecciones legislativas de la Ciudad de Buenos Aires se han nacionalizado: la macroeconomía y la geopolítica han desplazado al Metrobus y los pasos bajo nivel de la discusión. En este contexto, en el que se juega el futuro del PRO, la Ciudad aparece como reducto de un electorado más progresista que se resiste a la ola libertaria. El clásico de la Capital a contramano de la tendencia electoral nacional parece reeditarse.

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Innegablemente, las elecciones de legisladores de la Ciudad de Buenos Aires del 18 de mayo se han nacionalizado. Las principales fuerzas políticas en pugna –el mileísmo, el PRO resiliente y el neokirchnerismo progresista– han hecho campaña hablando de política nacional, y convirtieron a la cuestión local en un asunto subalterno....
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